Jaguar Land Rover dio un paso más hacia la nueva era de electrificación y conectividad abriendo un nuevo centro de pruebas en Gaydon (Reino Unido). Aquí se evaluarán posibles interferencias radioeléctricas que podrían afectar el correcto funcionamiento de la nueva generación de automóviles.

El Laboratorio de Compatibilidad Electromagnética (LCE), garantizará que los nuevos modelos fabricados por la compañía, cumplan con la legislación actual y los estándares de calidad para la conectividad electrónica. El nuevo Range Rover Sport, fue el primero en someterse a un programa de pruebas personalizado en las instalaciones.

Este recinto cuenta con dos cámaras anecoicas, capaces de absorber las ondas sonoras o electromagnéticas sin reflejarlas como, por ejemplo, una carretera rodante eléctricamente “silenciosa” que permite a los ingenieros probar vehículos a gran velocidad, así como equipos para evaluar el rendimiento de componentes individuales, como las baterías o los motores eléctricos. En este lugar también se puede evaluar el funcionamiento de los sistemas Bluetooth, GPS, WiFi, 4G, 5G, control de crucero adaptativo, carga inalámbrica y monitoreo de puntos ciegos, entre otros.

“Es muy importante poder probar la compatibilidad electromagnética de nuestros vehículos. La inauguración de esta nueva instalación de pruebas es un gran paso para nuestra empresa y jugará un papel crucial para ayudarnos a brindar calidad, legalidad y satisfacción del cliente en cada uno de los modelos”, aseguró Peter Phillips, director de Electromagnetismo y Cumplimiento Normativo de Jaguar Land Rover.

Desde la marca destacaron que las pruebas en el Laboratorio de Compatibilidad Electromagnética son cruciales a la hora de desarrollar nuevos productos, esto por los avances de la industria establecidos en aumentar la fabricación de motores eléctricos, la gama de servicios digitales, almacenamiento en la nube de cada uno de los vehículos como actualizaciones de software Over the Air, entre otras.

Cada una de estas innovaciones demuestran el compromiso de Jaguar Land Rover en brindar a los clientes la conectividad más avanzada en cada uno de los vehículos, acelerando la transición hacia la electrificación a través de la estrategia Reimagine.