Son múltiples los desafíos en materia medio ambiental que debemos enfrentar hoy con sentido de urgencia y es imperativo reconocer el impacto diferenciado que tiene estos problemas en mujeres y hombres. Pero, sobre todo, el papel que desempeñan las mujeres como agentes de cambio para enfrentarlo.

Esto quedó de manifiesto en las presentaciones realizadas en un conversatorio virtual liderado por la ministra del Medio Ambiente, Carolina Schmidt y su par del ministerio de la Mujer y Equidad de Género, Mónica Zalaquett, donde además participaron mujeres destacadas del mundo medioambiental.

Ambas destacaron la necesidad de tener mujeres empoderadas como agentes de cambio y que es fundamental integrar sus voces y necesidades los procesos de transformación hacia un desarrollo más sustentable, inclusivo y resiliente.

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“Como país hemos tratado de llevar este compromiso con la inclusión del enfoque de género en políticas medioambientales y climáticas, a todos los espacios internacionales. Este año por primera vez los 33 ministros en la XXII reunión del Foro de Ministros de América Latina y Caribe aprobaron una Decisión para promover la Igualdad de Género en la Gestión Ambiental, así como se comprometieron a implementar un plan de trabajo, cuya implementación Chile debe liderar como presidencia del Grupo Regional de Expertos sobre Género y Medio Ambiente”, destacó la ministra Schmidt.

Por su parte, la ministra Zalaquett señaló que “como gobierno nuestra agenda de género tiene la mirada puesta en el futuro de las mujeres, hemos querido abordar los desafíos que marcarán los próximos años con escenarios como la reducción digital y el cambio climático que sabemos impactan a las mujeres de forma diferenciada para así impulsar políticas públicas con enfoque de género que les entregue herramientas para ser las protagonistas y una comunidad que estará marcada por estos escenarios”.

Participación de la mujer

Una de las invitadas a este conversatorio fue la Coordinadora Residente del Sistema de ONU Chile, Silvia Rucks  quien fue enfática en decir que “hasta que no visibilicemos de manera clara la forma diferenciada en que los procesos nos afectan a mujeres y a hombres, no podremos tomar las medidas necesarias para enfrentar la brecha que eso genere y esto, que resulta muy obvio como en la inequidad de los ingresos o en la participación política, no es menos impactante ante la alta vulnerabilidad que las mujeres presentan frente al cambio climático y la pérdida de biodiversidad”.

Una postura que apoyó Maisa Rojas, coordinadora del Comité Científico COP25 destacando que “en el fondo todas las crisis que estamos viendo, cambio climático, biodiversidad, esta crisis sanitaria y económica nos muestran que son las diferencias estructurales las que están en la base de estos problemas. Es importante que el país entienda que sin resolver estos problemas estructurales incluyendo la desigualdad de género no podremos construir un mundo mejor”.

De acuerdo al informe “Coyuntura Laboral en América Latina y el Caribe”, Naciones Unidas proyecta que la transición hacia la sostenibilidad energética crearía más de un millón de empleos en América Latina y el Caribe hacia 2030.