Nissan trabaja para impulsar y democratizar la conducción autónoma

El sistema ProPilot refuerza el control del conductor sobre el vehículo, asistiéndole en las tareas de guiado de dirección, aceleración y frenado, por lo que rebaja el stress en la conducción a la vez que aumenta la seguridad de los pasajeros.


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Son muchos los fabricantes de automóviles que están dedicando gran parte de su inversión al desarrollo de la conducción autónoma, tendencia en la que destaca el caso de Nissan y su sistema Propilot.

Esta tecnología ya lo incorporan cuatro vehículos: el Nissan Leaf (el eléctrico más vendido del mundo), el Nissan Qashqai, el nuevo Nissan Juke y el Nissan X-Trail. Más de 350.000 vehículos en todo el mundo ya incorporan este sistema.

El sistema ProPilot refuerza el control del conductor sobre el vehículo, asistiéndole en las tareas de guiado de dirección, aceleración y frenado, por lo que rebaja el stress en la conducción a la vez que aumenta la seguridad de los pasajeros.

Diseñado para circular por carril único en autopista, este modelo se ha optimizado para funcionar en condiciones de tráfico denso o a altas velocidades, ya que cuenta con la ayuda de un radar y diversas cámaras, que ajustan la velocidad respecto al tráfico precedente y mantienen el coche en el centro del carril.

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Desde la compañía destacan que la conducción autónoma es un elemento cada vez más demandado por el gran público, tal y como lo confirma el hecho de que el 90% de los usuarios particulares que han comprado un Nissan Leaf lo han hecho con el sistema ProPilot.

Cabe resaltar que recientemente se presentó en Japón el Nissan ProPilot 2.0, una evolución del sistema ProPilot que es capaz de conectarse al sistema de navegación del coche, para ayudar al automóvil que lo equipe a llevar a cabo ciertas maniobras y seguir una ruta predeterminada.

Desde Nissan hacen hincapié en que con ProPilot 2.0, por primera vez, el vehículo puede circular por carril único sin que el conductor tenga que manejar el volante “hands off- eyes one”, y podrá cambiar de carril de manera autónoma. Por su parte, el conductor recibe ayudas sonoras y visuales muy intuitivas cuando el sistema le pide que ponga ambas manos en el volante y confirme el inicio de dichas maniobras mediante un interruptor.