Hoy en día, Big Data, servicios Cluod, Internet de las Cosas, IoT, machine learning, Inteligencia Artificial o Transformación Digital, son palabras de un lenguaje común, en un marco de cambios o “transformación” que vive la sociedad respecto de cómo realizamos nuestras actividades cotidianas, lo cual no significa que estas tecnologías o conceptos estén del todo incorporadas en nuestro quehacer laboral.

En un ámbito más personal, podemos decir que la vinculación con estas tecnologías se realiza a través de nuestros dispositivos móviles o smartphones, que han permitido una tremenda conectividad entre quienes los utilizan. Datos de la Agencia Internacional de Energía señalaban que a 2017 existían cerca de 2 billones de dispositivos conectados, esperando que esta cifra crezca el presente año 20 billones de dispositivos.

Estas cifras levantan, por otro lado, grandes desafíos en el ámbito de la ciberseguridad y privacidad de la información. Con esta realidad, para el sector eléctrico y en particular para el Coordinador, representa una urgente necesidad incorporar en sus procesos tecnologías como las ya indicadas.

La captura de información desde los clientes finales, el aumento sostenido de la cantidad de empresas coordinadas y sus instalaciones, los procesos de cálculo de las Transferencias económicas, la alta penetración de energías renovables variables y los desafíos operacionales en el marco de la descarbonización del sistema eléctrico, la previsión y comportamiento de la demanda, el teletrabajo y acceso remoto a equipos y servicios por parte de nuestros trabajadores y clientes, entre otros procesos, no podrán ser abordados con éxito sino profundizamos y aceleramos la transformación digital en las empresas y organizaciones que se desempeñan en el sector de energía, en general, y el sector eléctrico en particular.

En lo específico, creo no equivocarme al decir que existe un consenso general que incorporar inteligencia artificial al Sistema Eléctrico Nacional (SEN) es de gran relevancia, permitiendo por un lado aprovechar de mejor forma el potencial de las energías renovables, y por otro, aportar al desarrollo de la generación distribuida o Smart grid.

La inteligencia artificial (IA), ciencia con importantes vertientes de investigación, también ha demostrado su potencial en innumerables aplicaciones, en especial donde existen procesos de carácter recurrente y que disponen de suficiente data histórica para diseñar modelos o algoritmos, que puedan aprender y predecir comportamientos futuros de un determinado fenómeno o proceso.

Este es el caso de la seguridad dinámica que debe monitorear y asegurar el Coordinador para el SEN. Actualmente, se encuentra en desarrollo por parte de la Universidad de Chile una iniciativa que permitirá predecir el comportamiento de la frecuencia del sistema, dada una determinada configuración del SEN para un conjunto definido de fallas o contingencias. Para lograr esto, se utilizará información histórica para generar los algoritmos que aprendan de la operación del SEN ante contingencia, de manera el Coordinador pueda disponer de una potente herramienta de predicción del comportamiento del SEN en tiempo real ante la ocurrencia de eventos o fallas.

Si bien el Coordinador ha incorporado a la fecha tecnología de punta, como Blockchain en algunos de sus procesos, esta herramienta representa un salto significativo en la función legal del Coordinador de asegurar la continuidad y calidad de servicio en nuestro sistema eléctrico.