Inteligencia artificial: Una tecnología clave para el desarrollo de los motores

El potencial de la IA está siendo utilizado en el desarrollo de sistemas de propulsión, tanto en el campo de la movilidad eléctrica como en el de la combustión interna.


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Porsche utiliza inteligencia artificial (IA) en el desarrollo de sus vehículos, para hacer que los sistemas de propulsión sean más eficientes y optimizar los procesos de desarrollo.

La inteligencia artificial da a los computadores la capacidad de analizar problemas y resolverlos automáticamente, de una manera similar a la que lo haría un ser humano. El potencial de la IA está siendo utilizado en el desarrollo de sistemas de propulsión, tanto en el campo de la movilidad eléctrica como en el de la combustión interna.

En el desarrollo de motores de combustión tradicionales, por ejemplo, la IA resuelve el problema de predecir la cantidad de gas en el aceite del motor. Dado que un alto contenido de gas provoca la formación de espuma en el aceite y, por lo tanto, una menor capacidad de lubricación, los ingenieros deben diseñar el circuito para que genere el menor contenido posible de gas. Sin embargo, es casi imposible medirlo con el motor en marcha. Ahora, un nuevo proceso de IA de Porsche permite predecir de forma fiable el contenido de gas para hacer una mezcla ideal en el aceite del motor.

Pudimos mantener la capacidad informática requerida por el algoritmo de IA para integrarlo fácilmente en el proceso de desarrollo del motor”, dijo la ingeniera Hong Truc Jung, responsable de las herramientas de IA para los motores en Porsche.

“Durante las pruebas de banco, ejecutamos este algoritmo de forma continua, lo cual nos proporciona datos relevantes”, agregó. El primer propulsor en el que fue implementado este nuevo proceso de inteligencia artificial fue el bóxer de seis cilindros del Porsche Cayman GT4.

Envejecimiento de las baterías

Por otra parte, Porsche Engineering, empresa subsidiaria de Porsche, ya es capaz de determinar la manera en la que envejecen las baterías de iones de litio. Gracias a ello, las predicciones de autonomía que proporciona el auto al usuario durante la conducción son más fiables.

El algoritmo de IA utiliza la resistencia interna de la batería para conocer su envejecimiento. Entre otros datos, tiene en cuenta la temperatura y el estado de carga, así como los resultados obtenidos en pruebas a largo plazo y con flotas de autos. En el vehículo, la inteligencia artificial se adapta al perfil de usuario del conductor para que la predicción sea cada vez más precisa.