En el marco del Salón del automóvil de Shanghái, Aston Martin dio a conocer su modelo Rapide E 2019, un coupé que si bien mantiene las tradicionales líneas de la marca británica cambia su motor de combustión por dos unidades eléctricas emplazadas en la zona trasera del auto que pueden llegar a generar hasta 610 CV de potencia y 950 Nm.

El Rapide E se alimenta de una batería eléctrica de 800 Voltios con una carcasa de fibra de carbono y Kevlar, una capacidad instalada de 65 kWh y más de 5.600 celdas cilíndricas de iones de litio 18650. Este paquete de baterías a medida se ubica en el lugar que suele ocupar el V12 de 6.0 litros. Además, la caja de cambios y el tanque de combustible se hallan junto al sistema de 800 Voltios, permitiendo una carga más eficiente y características térmicas mucho mejores que las arquitecturas eléctricas existentes. Este sistema de batería alimenta dos motores eléctricos montados en la parte trasera, que producen una salida combinada de poco más de 610 CV y unos 950 Nm de par motor.

El espacio antes usado por un motor 6.0 V12 ahora es ocupado por un paquete de baterías que ofrecen alrededor de 320 kilómetros de autonomía.

La velocidad máxima del Rapide E es de 249 km/h, pudiendo acelerar de 0-100 Km/h en menos de 4,2 segundos y de 80-112 Km/h en 1,5 segundos.

Es el primer automóvil fabricado en el moderno centro de producción de Aston Martin ubicado en St Athan (Reino Unido) – la sede de la electromovilidad de la marca – Rapide E representa el primer paso hacia la estrategia eléctrica que busca desarrollar la compañía y el éxito de Lagonda, la marca de lujo de cero emisiones. Rapide E es una edición especial con una producción limitada a 155 unidades desarrollada en colaboración con Williams Advanced Engineering (WAE).

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Sistema de carga

El modelo es capaz de cargarse a una velocidad de 297 Kilómetros de autonomía por hora, gracias al cargador de 400 Voltios y 50 kW. Sin embargo, el sistema de batería de alto voltaje de 800V del automóvil permite una carga aún más rápida de 498 Km/hora, utilizando un cargador de 800 V que ofrece 100 kW o más. Para la carga en destino, el automóvil también cuenta con un cargador de AC de alta potencia a bordo, capaz de recargar la batería en tres horas.