Miembros del Comité Asesor por la Acción Climática advierten preocupación por reducción de impuestos a combustibles

En una carta abierta dirigida a la Cámara de Diputados se indica que el proyecto de ley «contradice los esfuerzos sostenidos del país y va en contra de los lineamientos internacionales para hacer frente a la crisis climática».


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Un grupo de 25 miembros del Comité Asesor por la Acción Climática, a través de una carta abierta dirigida a la Cámara de Diputados, manifestó su preocupación por «la posibilidad de que se apruebe una reducción del impuesto específico a los combustibles (IEC) en el actual contexto social, económico y ambiental, propuesta por un grupo de diputados».

Los firmantes de la misiva representan a actores de la sociedad civil, academia, y del sector público y privado, entre los cuales figuran organizaciones ambientalistas y asociaciones gremiales del sector energético.

Si bien se indica que se comprende que la medida apunta a rebajar el costo de la vida de los chilenos en la situación compleja que enfrentamos debido a la pandemia, en la carta se plantea la necesidad de «implementar medidas alternativas orientadas al mismo fin, sin afectar la salud de la población ni los compromisos internacionales de acción climática que hemos asumido como país y que, estamos convencidos, apuntan en la dirección correcta».

«Ante la crisis económica, es mucho más efectivo brindar ayuda al costo de vida de los primeros quintiles y tomar medidas focalizadas en las zonas extremas, mientras no haya alternativas más limpias y accesibles económicamente para movilizarse y calefaccionarse», se señala.

Según se argumenta, «con una reducción del impuesto, los principales beneficiados serán hogares de ingresos altos, ya que el quintil de mayor ingreso paga el 80% de la recaudación del impuesto».

También se afirma que «reducir el impuesto implica una pérdida de recaudación al Estado del orden de US$1.000 millones al año, en momentos en que, debido a la pandemia, más fondos públicos se requieren para ir en ayuda de los más necesitados».

Y se expresa: «Hemos asumido compromisos vinculantes ante la comunidad internacional y estamos construyendo una Ley Marco de Cambio Climático que, de acuerdo a los estándares internacionales, considera entre sus principios el de Progresividad y el de No Regresión. En ese marco, esta iniciativa contradice los esfuerzos sostenidos del país y va en contra de los lineamientos internacionales para hacer frente a la crisis climática».

Por último, la carta indica que «nos asiste la convicción de que la propuesta de reducir los impuestos a los combustibles favorece desproporcionadamente a los sectores de mayores ingresos y afecta gravemente el interés público. Se daña, en  momentos críticos para nuestra sociedad, la capacidad del Estado de impulsar una recuperación resiliente que permita abordar los enormes desafíos que nos deja la pandemia en materia de empleo, educación, salud y de promover un desarrollo sostenible para nuestro país».