Nissan vislumbra un futuro con cero fatalidades. Para ello, la firma japonesa remarca su prioridad en la seguridad de todos los pasajeros dentro de un vehículo y, por supuesto, donde incluye a los menores de edad.

Uno de ellos son los sistemas de retención infantil (SRI) en el auto, que habitualmente se conocen como “butacas”, “sillitas”, “car seats” o “huevitos”, que permiten transportar de manera segura a los pequeños menores de 12 años en el asiento trasero.

Estos son fundamentales para reducir la probabilidad de afectaciones o mortalidad, y favorecer la seguridad durante el viaje.

Actualmente, la marca comercializa en los mercados de Argentina, Brasil, Chile y Perú, los cuales vienen equipados con el sistema de anclaje ISOFIX en los dos asientos laterales traseros, que permite fijar la silla infantil de manera más sencilla. En su visión Nissan Ambition 2030, la seguridad ocupa un lugar primordial.

Al viajar con menores de edad, es posible poner en práctica algunas recomendaciones sobre el sistema de retención infantil:

1. Verificar anualmente el ajuste de los infantes, al asiento.
2. Comprobar la fecha de caducidad del huevito, sillita o butaca.
3. Informarse sobre cuándo hay que cambiar a los niños de un huevito o sillita, a un booster (asiento elevado). Tanto la edad como el peso y la altura son elementos que definirán la transición de uno a otro y la posición (contramarcha o mirando hacia adelante)
4. Realizar la prueba del pellizco: después de abrochar y apretar el arnés, pellizcar el arnés en el hombro. Si los dedos se deslizan fuera de la correa, el arnés está ajustado. Si se logra pellizcar la correa entre los dedos, hay que continuar ajustando.
5. En invierno, quitarles los abrigos a los menores ya que pueden afectar el ajuste del arnés en un asiento de seguridad. El sistema de anclaje ISOFIX puede simplificar la logística en días de frío ya que permite que el proceso sea más ágil y rápido
6. Reemplazar el sistema de retención infantil luego de un choque: el acolchado de espuma dentro de un asiento de automóvil puede volverse inestable incluso después de un choque menor. El asiento puede verse bien, sin embargo, podría estar dañado.
7. Ubicar a los niños menores de 12 años en el asiento trasero. Esto los mantiene alejados de la zona de despliegue de los airbags, lo que, en una situación de choque de impacto frontal, puede presentar un alto riesgo.