La fuerte alza de hasta 3 que se esperaba para este lunes en el precio de las bencinas encendió las alarmas al interior del principal gremio empresarial del país: la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC). Y también en el gobierno, considerando que el primer mes de la Presidenta Bachelet se teñirá de negro con la inflación causada por los combustibles.
El presidente del gremio, Hernán Somerville, se lanzó contra los impuestos del precio de los combustibles, alegando que más allá de buscar mecanismos para impedir las alzas, debía revisarse su componente tributario.
«En esto hay ser consistentes, coherentes y serios (…) el país tiene que pagar el costo de los combustibles y el 50% del costo es impuesto y ahí deberíamos empezar a hablar y no buscar fórmulas que unas se complican con las otras… esa es la alternativa», dijo el dirigente.
En efecto, de los 03 a los que se encuentra la gasolina de 97 octanos en Santiago, 51 son sólo por concepto de impuestos, entre los que se incluye el Fondo de Estabilización de los Combustibles (,2 esta semana, pero en otras ha llegado a ser de casi 0), el impuesto específico (90,9) y el IVA (,6).
A juicio de Somerville, las realidades de precio tienen que respetarse, y por lo tanto «si hay fórmulas técnicas que de alguna manera puedan compensar, estudiémoslas, pero de una manera permanente, consistente, que no se estén modificando permanentemente. Y si queremos hablar de altos precios del petróleo yo invito a meditar que el 50% del precio es impuesto», dijo.
Sin embargo, pese a la voces que llamaban a eliminar de forma inmediata la aplicación del FEPC -que hasta ahora sólo ha operado como impuesto y no como subsidio-, el Gobierno decidió buscar una fórmula para operar con él.
Así lo aseguró la propia Presidenta Michelle Bachelet, quien luego de la actividad que tuvo ayer en San Joaquín, explicó que «hay alzas del petróleo a nivel mundial, pero gracias a que tenemos el Fondo de Estabilización que va comenzar a funcionar (desde el lunes), aquellas alzas que puedan darse serán atenuadas por el Fondo».
En efecto, la Comisión Nacional de Energía (CNE) elaboró un informe técnico que fue entregado al ministerio de Hacienda con las alternativas disponibles para frenar el alza.
En efecto, el titular de la cartera, Andrés Velasco, ha sostenido en las últimas horas reuniones tanto con el secretario ejecutivo de la CNE, Pablo Serra, como con la ministra de Minería y Energía, Karen Poniachik, y se espera que hoy Hacienda pueda revelar el modo en que pondrá el precio de la bencina por sobre el tope de la banda con la que opera el fondo (ver recuadro).
Así, a partir del lunes -y por primera vez desde su existencia- el FEPC operaría como subsidio para los consumidores, utilizando parte de los US1 millones que ha acumulado.
Cómo opera
El mecanismo con el que opera el FEPC (que incluye a la bencina, el diésel y el kerosene) consiste en establecer una banda de precios, en la que si el valor de paridad de importación supera el tope de la banda (+5%), el Gobierno entregará un crédito fiscal al productor o importador, pero si este precio está por debajo del mínimo de la banda (-5%), se aplicará un impuesto de beneficio fiscal que permitirá reingresar recursos al fondo.
Fuente: Emol.