(El Mercurio) En 10% de la capacidad eléctrica que logró contar con la aprobación ambiental entre 2010 y 2012, y que suma 11.269 megawatts (MW), entrará en operación inmediata. La situación se torna aún más preocupante y genera incertidumbre, señalan empresas y expertos, porque a partir de 2014 no se vislumbran proyectos de envergadura que se ejecuten.
De acuerdo a cifras del Ministerio de Energía, desde que asumió Sebastián Piñera en 2010, se han ido crecientemente otorgando permisos ambientales a iniciativas eléctricas. En 2010 se autorizaron 1.590 MW, fueron 4.323 en 2011 y en 2012 otros 5.356 MW. Pero para este año sólo se prevén que operen unos 1.057 MW, gran parte de ellos en la zona norte del país.
Según estimaciones de empresas, en el Sistema Interconectado Central (SIC) que va entre Taltal y Chiloé, un 5% de las obras autorizadas se ejecutará y entre ellas están las centrales San Andrés (40 MW), El Paso (40 MW), Campiche (270 MW), Angostura (316 MW), El Arrayán (115 MW), Talinay (90 MW) y Viñales (32 MW).
«Han sido aprobados o están en tramitación ambiental más de 20 mil MW en proyectos de distintas tecnologías y en manos de diversas empresas (…) pero el problema es que sólo una fracción menor se está construyendo», advierte Bernardo Larraín Matte en una comunicación a los accionistas.
«El tema energético es un pendiente importante, porque en estos cuatro años no se han visto grandes avances» agrega al respecto Susana Jiménez, economista senior de Libertad y Desarrollo (LyD). Agrega que no basta con analizar cuántas iniciativas eléctricas han logrado su aprobación ambiental, porque gran parte de los proyectos tienen problemas después de haber sorteado con éxito este requisito.
LyD dice que en estos momentos presentan problemas -y en la práctica están paralizados- proyectos que en total suman 8.939 MW, entre los que destacan HidroAysén, Energía Minera, Punta Alcalde, Castilla, Energía Austral, Neltume, Parque Eólico de Chiloé, entre otros. «Al Gobierno le ha faltado firmeza para desarrollar proyectos eléctricos», concluye esta experta de LyD.
Y es que desde 2014 en adelante, no existe certeza de que se vayan a hacer proyectos de más de 100 MW, pese a que dada la actual demanda el país necesita al año 350 MW. «Preocupa esta escasez de proyectos a futuro, porque vamos a tener un suministro más frágil», dice Jiménez.
Esta menor capacidad explica por qué no se han presentado ofertas en los últimos cinco procesos de licitación de las empresas distribuidoras, así como también el alza de precios y dificultades para abastecer a clientes industriales y mineros, alerta el presidente de Colbún, Bernardo Larraín Matte, en la memoria de la compañía.
Según Susana Jiménez, «no se va apagar la luz, pero se va a encarecer más la cuenta», porque el sistema recurrirá a fuentes más caras, como el diesel.
Agenda trabada
Hoy existe sólo un proyecto de la agenda energética del Gobierno que puede aprobarse en esta legislatura: las concesiones eléctricas. «El Gobierno se ha jugado por esta iniciativa, que es un proyecto muy importante para desarrollar el sector», comenta la directora del programa legislativo de LyD, Natalia González. La acusación constitucional al ministro de Educación, Harald Beyer, puede atrasar la agenda, añade.
Los otros proyectos clave del sector son la «carretera eléctrica», que a juicio de la experta legislativa de LyD es más complejo de aprobar en este período, y el de la interconexión eléctrica, que al no ser posible hacer por vía administrativa se haría mediante un proyecto de ley.
Y hay una dificultad adicional: la reforma a los Cdec. Hay dos Centros de Despacho Económico de Carga (Cdec) en el país, uno para el Norte Grande y otro para el Centro Sur (SIC) y el Ejecutivo se comprometió a cambiar su gobierno corporativo para darles más autonomía. El cambio administrativo no fue posible, porque la Contraloría rechazó el borrador que el Ministerio de Energía le envió. Así las cosas, este cambio tendría que hacerse vía ley, lo que se torna improbable dada la alta carga legislativa de la cartera.
HidroAysén baja su dotación a 20 personas
El megaproyecto en que son socios Colbún (49%) y Endesa (51%), HidroAysén, es el más grande de los proyectos paralizados, según un estudio de LyD.
En el caso de HidroAysén, su paralización se hizo explícita cuando en mayo de 2012 la eléctrica de los Matte, Colbún, comunicó que detenía el estudio de impacto ambiental de la línea de transmisión por la falta de certidumbre para invertir.
Hasta ahora, en ese proyecto los socios han desembolsado US$ 280 millones, pero como está parado, comenzaron a reducir el personal a su mínima expresión. Si hace dos años tenían un centenar de personas en HidroAysén, ahora sólo son 50 y a fines de 2013 quedarán unas 20, confirman profesionales vinculados al proyecto.
___________________
6% crece la demanda eléctrica en Chile cada año, lo que implica que se debieran sumar cada año 350 MW al sistema.
8.939 megawatts están paralizados en el país, pese a contar con su permiso ambiental, según LyD.
20 mil megawatts tienen resolución ambiental al día o están en proceso de obtenerla.
3,6 megawatts/hora es el consumo al año de cada chileno. En California, EE.UU., el consumo es tres veces más.
Fuente / El Mercurio