(El Mercurio) Por más de dos horas se prolongó la reunión-almuerzo que sostuvieron ayer en La Moneda el Presidente Sebastián Piñera, junto con los ministros de Hacienda, Felipe Larraín, de Economía, Pablo Longueira, y de Segpres, Cristián Larroulet, además del subsecretario Tomás Flores, con la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC).
Dos fueron los principales temas que marcaron este cónclave, el segundo en menos de dos semanas, luego que el Gobierno iniciara una nueva estrategia en su relación con el sector privado: la crisis externa y la necesidad de impulsar proyectos energéticos.
La primera de estas materias fue abordada al inicio de la reunión por el propio Mandatario quien, tras participar en la cumbre del G20 en México, advirtió a los empresarios que la crisis económica en Europa ha sido «más profunda de lo que se pensaba», que en Estados Unidos no se ve una recuperación rápida y que la desaceleración de China se ha profundizado, según quienes participaron en la reunión.
Sobre los coletazos a nivel interno, advirtió sobre el efecto que genera en las arcas públicas la fuerte caída experimentada por el precio del cobre.
En los últimos dos meses la baja ha sido de casi 10%, llegando a niveles de US$ 3,32 la libra.
De ahí que reafirmara el compromiso del Gobierno en mantener las cuentas fiscales ordenadas y la protección del empleo. En este punto, agregó que subir en el actual contexto el salario mínimo por sobre el 6% nominal ofrecido por el Gobierno generará un «impacto negativo», principalmente en las pymes».
De acuerdo con quienes participaron en la reunión, Piñera hizo un llamado a cuidar el país y a mejorar el clima interno, ya que «vienen tiempos difíciles».
El ministro Larraín reforzó estas advertencias, insistiendo en que el Gobierno está trabajando en varios frentes y que las medidas de protección de empleo, que forman parte del plan de contingencia, serán ingresadas al Congreso una vez que la CPC -que está tratando de aunar una postura común con la Central Unitaria de Trabajadores (CUT)- envíe sus comentarios a la iniciativa.
«El mundo nos hace el trabajo más difícil, pero seguiremos preparándonos para enfrentar una situación peor», afirmó Larraín a la salida de la reunión.
La autoridad agregó que el gasto público no es la «principal forma» de afrontar el cuadro descrito, sino en proteger la liquidez, el empleo y la inversión.
Sobre la reforma tributaria, el ministro indicó que el Ejecutivo está realizando esfuerzos para que se apruebe antes de que comience la discusión presupuestaria el 1 de octubre.
Ronda empresarial
A su turno, el primero de los empresarios en tomar la palabra fue el presidente de la CPC, Lorenzo Constans, quien al igual que en la reunión del martes pasado puso sobre la mesa el tema energético y la necesidad de establecer una agenda con plazos.
Piñera coincidió con los privados en la preocupación frente a esta materia y pidió a los empresarios reunirse con el ministro del ramo, Jorge Bunster.
La CPC se encontrará con la autoridad el 10 de julio y el primer punto que se buscará abordar es la transmisión en la carretera eléctrica.
A la salida de la cita, Constans y el líder de la Sofofa, Andrés Concha, reiteraron que hoy los costos energéticos restan competitividad al país.
El segundo tema que Constans abordó en el encuentro fue la seguridad en La Araucanía y, al respecto, entregó cifras duras sobre denuncias y sectores más afectados.
Otros representantes del sector privado que tomaron la palabra en la cita fueron Carlo Solari (Falabella), Jorge Awad (ABIF), Carlos Eugenio Jorquiera (CNC) y Concha, entre otros.
Al finalizar la reunión, Piñera hizo un llamado a los privados a reimpulsar entre las empresas las buenas prácticas y a condenar con fuerza las malas.
Fuente / El Mercurio