A la hora de proyectar cuál será el desempeño de la economía durante este año, el análisis de los economistas es categórico: energía y consumo son, por lejos, los indicadores clave que marcarán el 2008.
En este sentido, Miguel Cardoso, gerente de estudios de BBVA, señala la importancia de observar los datos de generación de energía eléctrica por el resto del año, pues su impacto será determinante en la producción del sector industrial.
«Aunque esperamos una recuperación en la generación eléctrica para el tercer trimestre, pero si la crisis actual se agrava, el aumento de los costos impactará fuertemente en el desempeño del sector industrial», señala, mermando las posibilidades de tener un crecimiento óptimo para este año.
Alejandro Alarcón, gerente general de la Asociación de Bancos e Instituciones Financieras, ABIF, concuerda en el rol que juega energía, y agrega que «el rezago en el crecimiento mostrado hasta ahora por este sector es consecuencia del aumento en los precios de la electricidad».
Pese a que los indicadores clave que maneja son cambiantes, Leonardo Suárez, jefe de estudios de LarrainVial, comenta que en este momento está mirando precisamente «el precio spot de la energía, que ha subido mucho, para ver cuál será el costo marginal que enfrentarán las empresas», el que podría aumentar aun más si la sequía se agudiza.
Mirando el consumo
Otros de los indicadores clave para los economistas son el acceso al crédito y -en particular- las posibilidades de acceso que tendrán las personas.
Alejandro Alarcón, de la Asociación de Bancos e Instituciones Financieras, ABIF, comenta que el índice de créditos de consumo ya está entregando señales de que la capacidad de consumo de las personas será algo menor, producto de un reajuste realizado por la banca.
Pese a esto, Alarcón descarta que se esté restringiendo el acceso al crédito, aún cuando exista una mayor incertidumbre producto de la crisis subprime en Estados Unidos y por el impacto de ésta en el mercado local.
En este sentido, Guillermo Patillo, académico de la USACh, agrega que se debe mirar con más atención el desarrollo del endeudamiento, pues da luces de cuánto efectivamente está creciendo la economía, al tiempo que se observa la situación financiera de las familias.
Para Cristián Gardeweg, analista de Celfin Capital, los indicadores clave son el consumo de los próximos meses y el crecimiento, principalmente «por la incertidumbre del efecto de la alta inflación en el ingreso disponible y en el consumo de alimentos».
Gardeweg agrega que también observa el comportamiento de las importaciones, las que hasta el momento «reflejan que la demanda interna va como avión, pues mientras en el primer trimestre el PIB creció menos de 4%, la demanda interna creció en torno al 9%», un buen indicador de cara al resto del año, concluye.
Con todo, los economistas coinciden en la importancia de seguir con atención la evolución del escenario internacional, en especial los efectos de la crisis hipotecaria en Estados Unidos y el precio de los commodities este año; elementos que definitivamente influirán en el desempeño de la economía chilena en 2008.
Fuente: El Mercurio.