Entre mayo y junio próximos, dos buques de bandera venezolana comenzarán a transportar a la Argentina gas líquido, que sería luego gasificado en otro buque, preparado a tales efectos, ubicado en el puerto de Bahía Blanca.
Así lo afirmaron ayer funcionarios del puerto de Bahía Blanca a la agencia estatal de noticias Télam, mientras crecen en la industria los temores a que recrudezca la escasez de gas durante el invierno.
El proyecto final contempla la construcción de una planta regasificadora en Bahía Blanca, dicen en el Gobierno, donde estiman que la iniciativa podría terminarse en el plazo de un año y medio. Las obras serán emprendidas en forma conjunta por las empresas estatales Enarsa, de la Argentina, y Petróleos de Venezuela.
«Es un proyecto que se va a desarrollar en 18 meses y, en función de la cercanía del invierno, nos dijeron que en 100 días debería estar la evaluación hecha», dijo a Télam el presidente del Consorcio de Gestión del Puerto, Jorge Otharán.
«Desde el consorcio, la compañía Mega y Repsol YPF estamos cumpliendo con esos tiempos y suponemos que en mayo o junio llegará el primer barco», dijo el funcionario, que agregó que el proceso empezaría en un buque que traería gas natural licuado e ingresaría en la zona portuaria «cada 12 días, desde un buque nodriza hasta la planta regasificadora».
Otharán afirmó que, con todo el emprendimiento, la capacidad de oferta nacional de gas podría aumentar un 8%. El proyecto final, que fue anunciado por el ex presidente Néstor Kirchner en septiembre del año pasado, consiste en la instalación de una planta regasificadora en Bahía Blanca para la generación de 10 millones de metros cúbicos de gas por día, lo que supondría una inversión de US$ 442 millones.
Fuente: La Nación, Argentina.