La decisión de Endesa Chile de demandar al Estado para evitar que las juntas de vigilancia distribuyan las reservas de los embalses no tomó por sorpresa al mundo político.
Para el diputado Pablo Lorenzini (DC), la disputa es “entendible” porque es lógico que los agricultores aspiren a un mayor involucramiento en el tema dado que “el agua es su futuro”, como también tiene sentido la posición de Endesa, “pues es natural que vele por sus intereses con los riesgos que estamos teniendo”. Agregó que “por ello creo que cuesta tomar partido por alguna de las partes. Sin embargo, me parece que aquí tiene que primar el diálogo, apuntando siempre al bien nacional, tanto agrícola como energético”.
Paso agresivo
El diputado reconoció que el recurso legal presentado por la filial del holding Enersis “significa un paso más agresivo, pero la empresa debe comprender que es mejor el diálogo, sobre todo considerando los tiempos que llevan las resoluciones y apelaciones. Es válido que la compañía presente este tipo de recursos, pero no sé si es el mejor resultado”.
Lorenzini lamentó el riesgo que la discusión se politice y se introduzcan elementos que estorben o compliquen un análisis técnico.
Por otra parte, el senador Andrés Allamand (RN) manifestó que este conflicto “estaba cantado porque particularmente estos embalses son multipropósitos y generan impactos en generación y riego. Era de cajón que frente a la escasez de recursos se iba a producir esta disputa”.
En declaraciones a Radio Agricultura, Allamand contó que los agricultores con los que ha compartido tienen la idea que “definitivamente el MOP habría autorizado una utilización inusual del recurso a favor de la energía”.
El senador criticó la nula preparación del país frente a este tipo de emergencias.
“Así lo demuestran las cifras. En los últimos 30 años la agricultura generó una revolución. La actividad hoy es muy distinta a la de la época de la reforma agraria. Se podría pensar que en estos años el país podría haber hecho un esfuerzo más grande en materia de embalses, pero no se ha mejorado la capacidad más de un 20%. Solamente se han construido tres grandes embalses en los últimos 28 años”, señaló Allamand.
La acción legal de Endesa Chile pretende que el Estado admita que, dada su condición de firma eléctrica, para ella debe prevalecer la ley del sector y las instrucciones del Centro de Despacho Económico (CDEC) por sobre las normas del Código de Aguas.
“Las juntas de vigilancia no pueden legalmente dictar directrices o resoluciones que afecten las operaciones de las centrales hidroeléctricas, ni pueden alcanzar a los embalses artificiales”, planteó Endesa en su demanda.
Fuente: Diario Financiero