Los presidentes de Argentina, Brasil y Bolivia no lograron resolver este sábado una disputa sobre el reparto del gas boliviano, pero decidieron formar un equipo de trabajo para seguir negociando.
En la minicumbre realizada en Buenos Aires, los presidentes de Argentina, Cristina Fernández; de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, y de Bolivia, Evo Morales, la anfitriona no consiguió que su vecino brasileño aceptara ceder parte del gas boliviano que recibe.
Brasil, en cambio, ofreció suministrarle electricidad en caso de ser necesario.
La incapacidad de Bolivia para atender los compromisos de suministro de gas contraídos con Brasil y Argentina amenaza con una crisis energética en este último país durante el próximo invierno austral, de junio a agosto.
Luego de tres horas de negociaciones, el canciller argentino, Jorge Taiana, anunció la creación de una comisión de ministros de Energía —que incluirá a la estatal brasileña Petrobrás— que se reunirá en 10 días en La Paz.
“No se trata de gas”
Tras el encuentro, Lula explicó que “no se trata de gas, se trata de una política de solidaridad que los países del Mercosur tienen que tener para ayudarse los unos a los otros”.
“Las economías de todos nuestros países están creciendo, todos necesitan más energía”, agregó el presidente de Brasil.
Explicó que por eso “creamos un grupo de los tres ministros para que (…) podamos discutir cuáles son las fuentes de producción de energía que nosotros necesitamos”.
Por su parte, Petrobras ha comprometido inversiones en Bolivia de entre 750 mil dólares y mil millones de dólares para los próximos años, mientras que Argentina prestará a Bolivia 450 millones para la construcción de una planta separadora de gases.
La cumbre respondió a una iniciativa del presidente boliviano, que hace un mes reconoció que no puede atender los compromisos energéticos adquiridos con Brasil y Argentina.
La actual producción boliviana de gas ronda los 40 millones de metros cúbicos diarios, mientras que la demanda de los mercados externo e interno está en los 46 millones de metros cúbicos.
En 2006, Argentina y Bolivia firmaron un pacto en el que Bolivia se comprometió a suministrar 27.7 millones de metros cúbicos diarios de gas a partir de 2011, de los cuales 20 millones serán inyectados en el futuro Gasoducto del Noreste.
Desde 2004 Argentina atraviesa serias restricciones en invierno y verano por una creciente demanda de gas y electricidad, que aumentan a la par del crecimiento económico experimentado en los últimos años.
Fuente: La Jornada, México.