Las compañías mineras literalmente son la única salida a la complicación que en este minuto tiene a la generadora GasAtacama, prácticamente al borde de la quiebra. Sólo una negociación exitosa con las principales firmas de la industria en el Norte Grande permitirían a la empresa energética solventar los costos extra que le produciría mantener los contratos de abastecimiento con Emel –hasta 2012– tal como el viernes decretara el árbitro Ricardo Peralta.
No obstante, la probabilidad de que esto ocurra se ve más bien lejana. Si bien en las mineras optaron por no referirse al tema, fuentes de la industria aseguran que “es muy difícil que las empresas acepten aumentar sus costos por solventar la situación, considerando que se trata de grandes cantidades y que nadie garantiza la viabilidad de que GasAtacama se recupere”.
Asimismo, cercanos al Consejo Minero han reconocido que es un “tema que nos preocupa”, pero han declinado pronunciarse, considerando que “las empresas aún están evaluando todas las alternativas”.
De hecho, fuentes cercanas a los grupos controladores –Endesa Chile y Southern Cross con 50% cada uno– afirman que “aunque cabe la posibilidad de un acuerdo con las mineras, lo más probable es que finalmente se opte por la quiebra”.
Situación opuesta a lo sucedido el año pasado, cuando Codelco, BHP y Collahuasi acordaron financiar parte del sobrecosto que significaba generar con diésel para mantener el abastecimiento a los clientes residenciales.
Fallo
Por otra parte, aunque el viernes el gerente general de Endesa Chile, Rafael Mateo, informó, vía hecho esencial, que el fallo aún podía apelarse, los mismos controladoras ya habrían decidido no utilizar esta posibilidad, con el fin de no prolongar la decisión, puesto que, prácticamente, la totalidad de los escenarios son contrarios a la generadora.
En tanto, Rudolf Araneda, gerente general de GasAtacama, ayer permaneció todo el día en distintas reuniones viendo cuáles serán los próximos pasos a seguir.
Fuente: Estrategia