“Un negocio redondo que asegura ingresos por muchos años”. Así define un alto ejecutivo de Endesa la línea de transmisión eléctrica que llevará la energía de Aysén a la zona central, y que hoy negocia la empresa Transelec con el consorcio HidroAysén, formado por Endesa y Colbún. “Por ese motivo, la construcción de la línea ha despertado fuerte interés en otros competidores, que se han acercado tanto a Endesa como a Colbún a manifestar un interés concreto en participar. Son operadores de Europa que tienen capacidad técnica y experiencia en obras de similar magnitud”, relata. Hidroaysén, agrega el mismo ejecutivo, no tiene como única alternativa a Transelec. “Es la más probable opción, pero no la única. No tenemos una obligación con ellos y se decidirá por lo que sea más conveniente en términos económicos y técnicos. A Endesa y Colbún les conviene tener otros postulantes interesados en construir la línea. La competencia siempre es buena para este tipo de proyectos, dada la envergadura y los montos de inversión involucrados”, explica. Se estima que el proyecto supone una inversión de US$ 1.500 millones.
El interés de empresas extranjeras de participar en la construcción de la línea se produce en el marco de negociaciones comerciales entre Transelec e HidroAysén, que podrían extenderse hasta fines de enero. Si bien existen avances importantes, el acuerdo aún no está cerrado. “Es complejo, porque hay mil detalles. Es un contrato que debe durar 30 o 40 años y hay que ver cómo será el mercado en los próximos años. Aún no está definido cuánto será el cobro por la línea de transmisión.
Hay que analizar quién asume los riesgos de que cueste más cuando se construya. La negociación está lejos de terminar y está abierta la opción de que sea otro quien lo haga”, dice un conocedor de las tratativas.
Sin embargo, en Transelec estiman que en dos semanas podría cerrarse el acuerdo comercial con HidroAysén. Esta versión también es manejada al interior del Grupo Enersis, donde advierten que dado los avances del proyecto es difícil que entre a competir seriamente una nueva propuesta.
Sobre el interés de empresas extranjeras, fuentes de la sociedad destacan firmas como Alusa, de Brasil, Red Eléctrica, de España, Hydro Québec, de Canadá, y fondos de inversión. Personeros ligados a Alusa confirman su interés por construir la línea de transmisión que recorrerá más de dos mil kilómetros. “Ingresaríamos a competir con Transelec”, afirman.
En Transelec, en tanto, están afinando los últimos tramos del trazado del tendido que atravesará ocho regiones. Una de las zonas que se estudia con más detalle es Aysén, debido a la mayor presencia de lagos y montañas altas. Otra región compleja es la Novena y por eso la firma solicitó información a Conadi para no pasar por terrenos mapuches.
“En Pumalín hay que analizar cómo se causa menor impacto y compatibilizar eso con el camino. El tendido submarino que se planteó es entre 10% y 20% más costoso, lo que lo hace inviable y disminuye la capacidad de la línea en un 20%”, comenta una fuente de la compañía.
Fuente: La Tercera