A contar de hoy, las 206 estaciones de servicio YPF a lo largo del país pertenecen a la colombiana Organización Terpel, la que pagó US$ 210 millones en un negocio donde compitió con gigantes como Petrobras y Primax, sociedad esta última donde participa la chilena estatal Enap.
Por lo mismo, las estaciones de servicio comenzarán lentamente a cambiar su imagen y colores, pasando del azul y blanco al rojo y a llevar el nombre Terpel. Este proceso durará todo 2008.
La colombiana Organización Terpel es controlada por Promigas, sociedad en la cual el grupo Ashmore tiene un 53% de propiedad, el grupo Sarmiento un 14% y el resto está en manos de otros accionistas.
Fuente: El Mercurio.