Tras un extenso y conflictivo proceso de venta, mañana se concretará el desembarco de los nuevos dueños del 50% de la sociedad controlante de Transener, la transportista eléctrica más importante del país.
Se trata de la dupla que integran la empresa privada Electroingeniería y la estatal ENARSA, que desembolsaron US$ 54 millones para quedarse con las acciones que estaban en manos de la brasileña Petrobras.
Para ocupar los cargos que les corresponden tanto en la controlante Citelec, como en Transener, los flamantes propietarios designaron a un heterogéneo grupo de directores. Por el lado privado, las principales figuras serán los dueños de Electroingeniería que llevan tres décadas de actuación en el sector. Y por el lado estatal, la lista incluye a un ex titular de la UIA, a un ex funcionario de la Alianza y a un ex director técnico de Los Pumas.
Según los datos obtenidos por Clarín, los elegidos para compartir el manejo de la transportista con Pampa Hólding (el grupo de Marcelo Mindlin que tiene el 50% restante) son los siguientes:
A Transener ingresarán el presidente de Electroingeniería, Osvaldo Acosta y el ex timonel de la UIA, Héctor Méndez. Durante su gestión que culminó en abril de este año, Méndez -que ahora es titular de los empresarios del sector plástico- mantuvo las riendas de la entidad fabril sin generarle conflictos al Gobierno.
En el directorio de Citelec aterrizarán el vicepresidente de Electroingeniería, Gerardo Ferreyra y el ex legislador nacional del Frepaso, Horacio Viqueira. Cordobés de origen, Viqueira jugó en las últimas elecciones dentro del grupo kirchnerista más cercano al saliente intendente Luis Juez.
Para cubrir los puestos de síndicos, los escogidos serían Mario Blanco y el ex entrenador del seleccionado de rugby de Los Pumas, Rodolfo O»Reilly.
La estructura de Transener se completará con la confirmación de Carlos García Pereyra como gerente general y la incorporación de Antonio Caro -ex titular de la empresa energética de Santa Fe- como subgerente a cargo de las obras, la operación y el mantenimiento de la red de 8.800 km de líneas eléctricas.
Fuente: Clarín, Argentina.