Los litigios en el sector energético son cada días más frecuentes. Ya que aparte del que se lleva en la Corte de Apelaciones, producto del recurso que presentó Metrogas contra la Contraloría General de la República, a causa del cese de las obras de la planta de respaldo de Peñalolén, se podría sumar uno nuevo, de tipo arbitral, esta vez entre Colbún y la ya mencionada distribuidora.
¿Por qué? Por la diferencia en la concepción de precio que tendría Metrogas por el gas que Colbún está redireccionando al consumo residencial, razón por la cual la generadora alega que la distribuidora debería pagarle el sustituto que está utilizando, o sea diésel, el que significa un costo cuatro veces superior.
Situación por la cual, si las partes no llegan a un acuerdo, lo más seguro es que tengan que ir a un juicio arbitral, donde un juez dirimirá cual es el precio final, que la distribuidora tendrá que pagarle a la generadora.
No obstante aquello, se vislumbra difícil que ambas empresas lleguen a un acuerdo, ya que según un ejecutivo de Metrogas, “indudablemente, la empresa no está dispuesta a pagar lo que pide Colbún”.
Según Metrogas, si el gas que llega desde Argentina es insuficiente para poder satisfacer su demanda residencial y comercial, esta puede invocar el decreto 754, de manera que todo el gas que llegue se distribuya bajo una cierta prioridad preestablecida.
Prioridad que la resolución entrega “al abastecimiento de los sectores residenciales, comerciales y centros hospitalarios, siempre que la distribuidora que los abastece, no disponga de respaldo útil y suficiente para ellos, en condiciones técnicas y operativas” y, posteriormente, a las generadoras.
“De un tiempo a esta parte, todo el gas que llegaba, de manera independiente de qué permiso de exportación llegara, alcanzaba apenas para suplir la demanda RESCOM e incluso a veces, no suplía aquella situación, por ende la compañía tuvo que invocar la 754”, afirmó una fuente ligada a la disputa.
Sin embargo, la resolución 754 no “resuelve los precios de transferencia, por ende, permite tomar el gas aunque llegue mediante otro permiso, pero no señala cómo se debe pagar”, indicó un analista.
Revés Judicial
Por otra parte, la distribuidora sufrió un duro revés judicial en el caso de la planta de respaldo de Peñalolén, luego que la Corte de Apelaciones rechazara unánimemente la solicitud de orden de no innovar presentada por la empresa, que tenía por objetivo reanudar las obras paralizadas por la Municipalidad, mientras se resuelve el recurso de protección que presentaron en contra del fallo de la Contraloría.
Fuente: Estrategia.