Marzo de 2008. Ese es el plazo fatal que maneja Metrogas para iniciar las obras de su planta de propano aire en Peñalolén, instalación que está detenida tras un informe lapidario de Contraloría que determinó que la autorización provisional otorgada por la Corema metropolitana para hacer dicha obra no se ajustaba a derecho.
Según ejecutivos de la empresa, si esta planta no está en construcción en marzo del próximo año, no alcanzará a estar operativa en el invierno, cuando los cortes de gas de Argentina hagan imperioso su funcionamiento. Y como se prevé que el gas natural licuado (GNL) llegará ya en 2009, “ya no será rentable desembolsar US$ 10 millones en una instalaciónque servirá, en elmejor de los casos, sólo un año”, afirman.
Todo indica que el proceso para lograr la autorización de la planta puede tardar tanto como para que la instalación no se construya. Metrogas, cuyo presidente es Matías Pérez Cruz, está peleando en tribunales el fallo adverso de Contraloría e interpuso esta semana un recurso de apelación ante la Corte de Apelaciones. Ahí los plazos son inciertos. Y debe esperar, además, la tramitación ambiental total del proyecto, que puede demorarse mucho dada la oposición de la comunidad de Peñalolén, encabezada por el propio alcalde de ese municipio, Claudio Orrego.
¿Qué hacer sin gas y sin la planta? En Metrogas apuestan a que los cortes en el 2008 serían de la misma envergadura que los de este año, pero más largos. Si es así, “podríamos sobrevivir el 2008 sin restringir el gas residencial”, dice un director de la firma. En el sector eléctrico estiman que esta proyección es demasiado optimista, porque, además del factor Argentina, para el próximo año se prevé escasez de energía eléctrica.
Fuente / La Tercera