El grupo eléctrico belga Suez Energy será el único postor por el proyecto hidroeléctrico de 3.150 MW Santo Antônio en el río Madeira, región oeste de la Amazonía brasileña, señaló a la prensa en Río de Janeiro Victor Paranhos, director de la unidad local de Suez.
El Gobierno brasileño planea ofrecer Santo Antônio en una subasta a realizarse en octubre.
«Creemos que nuestra mayor ventaja competitiva al ofertar solos será la de optimizar el proyecto de Madeira. Será muy difícil para nosotros encontrar socios en 60 o 90 días. Pretendemos proponer un proyecto de alta calidad con energía económica», indicó.
Estrategia del proyecto
Las inversiones en el proyecto se estiman en 12.000 millones de reales (US.300 millones), según Paranhos, quien será el presidente de una compañía especial -llamada SPC- que Suez creará para construir el proyecto.
De tener éxito con su oferta, Suez venderá una participación minoritaria en SPC a una eléctrica federal y otros socios. SPC buscará también financiamiento del banco nacional de desarrollo BNDES y obtendrá dinero en las bolsas de valores locales mediante una OPI, sostuvo.
«BNDES es nuestro vehículo de financiamiento preferido, ya que tiene una visión a largo plazo, experiencia en el mercado, puede responder rápidamente y tiene también muchos fondos disponibles para este proyecto», subrayó.
Si Suez no tiene éxito en la subasta, ofertará por el segundo proyecto de Madeira -Jirau- de 3.300 MW, según Paranhos. El gobierno planea subastar Jirau a principios del 2008, y necesitará el mismo nivel de inversión que Santo Antônio.
La decisión complementa la estrategia global de Suez Energy de aumentar los cerca de 56 GW de capacidad instalada en 10 GW en el mediano plazo, de acuerdo con el ejecutivo.
Suez ya controla una generadora eléctrica en Brasil, Tractebel Energia, que posee una capacidad de 5 GW, y está construyendo los proyectos hídricos Estreito (1.087 MW) y São Salvador (243 MW).
El anuncio de Suez se produce dos días después de que la agencia federal de protección ambiental -Ibama- aprobara el estudio de impacto ambiental para el complejo Madeira.
Otras cuatro compañías se encuentran organizando grupos para ofertar por los proyectos: las firmas brasileñas de ingeniería Odebrecht, Alusa y Camargo Correa; y la eléctrica Light.
Oposición al proyecto
Paranhos confía en que la oposición ambiental al complejo Madeira no obstaculizará las subastas, que apuntan a que los proyectos inicien sus operaciones hacia el 2012 y 2013, respectivamente.
«Si logramos adjudicarnos la licencia para la construcción de Santo Antônio, podríamos terminarlo el 2012 en el caso de poder empezar a construir en mayo o junio del 2008», dijo Paranhos.
Esta confianza en el cronograma del proyecto se debe a los detallados requisitos para Madeira que Ibama explica en el documento de aprobación del estudio de impacto ambiental.
El nivel de detalle en las exigencias ayudará a agilizar el proceso para obtener la licencia ambiental completa, puntualizó el ejecutivo, alabando el trabajo de Ibama.
Fuente: BNamericas.