La ola de frío que afecta a Chile y a Argentina derivó finalmente en que el país transandino cortara por completo el suministro de gas natural a la zona central chilena, repitiendo el escenario vivido a mediados de mayo.
«La Comisión Nacional de Energía (CNE) fue informada por las autoridades argentinas que para hoy el envío de gas natural a través del gasoducto Gas Andes será, en principio, de cero metros cúbicos», indicó un comunicado CNE.
La entidad explicó que la nueva ola de frío que afecta a parte del territorio transandino ha provocado un aumento en la demanda eléctrica y de gas de ese país, «lo que incluso ha generado problemas con su propio abastecimiento de este combustible».
La CNE aseguró que las autoridades argentinas también comunicaron que esta decisión se estará reevaluando durante el día, «dependiendo de las medidas de carácter interno que se adopten para enfrentar sus dificultades».
Las autoridades energéticas chilenas recalcaron que el suministro de combustible para los clientes residenciales y comerciales de la zona central del país «no debiera verse afectado si esta situación se desarrolla sólo en forma transitoria».
La demanda sería cubierta mediante el uso del gas natural que aún permanece en el gasoducto Gas Andes -que en estas situaciones opera como respaldo- y a la operación de las plantas de respaldo que posee la distribuidora Metrogas en la Región Metropolitana.
El frío en Argentina se ha hecho sentir con fuerza esta semana e incluso Buenos Aires enfrentó una nevazón que no se veía en casi 90 años.
Pese a lo anterior, hasta ayer ese país siguió exportando un millón de metros cúbicos de gas natural a la zona central de Chile.
La demanda de los clientes residenciales de Santiago de Metrogas está en 1,6 millón de metros cúbicos diarios, por lo que el déficit lo está cubriendo con plantas de respaldo que usan propano aire, las que operan a casi el 50% de su capacidad.
Estas han permitido subir las reservas del gasoducto GasAndes de 3,5 millones a ocho millones de metros cúbicos, lo que da una holgura de varios días de suministro ante una prolongación de este corte total.
La detención en los envíos repite lo vivido a mediados de mayo, cuando hubo también un recorte total del suministro al gasoducto GasAndes, que transporta el hidrocarburo a la Región Metropolitana.
Fuente: La Tercera.