Un explícito llamado al Gobierno para que intervenga en la crítica situación energética que vive GasAtacama, hizo la propia generadora que está con la soga al cuello producto de los casi nulos envíos de gas desde Argentina para la producción eléctrica y que han derivado en el uso intensivo de diésel, un combustible mucho más caro.
Todo ello ha derivado en millonarias cifras rojas para la empresa. En efecto, operar con diésel le significa a GasAtacama del orden de US00.000 en pérdidas al día. Es por esto que la compañía dijo que no puede seguir con estos resultados (que en el primer trimestre llegaron a US0 millones) y que sus controladoras, CMS Energy y Endesa, no inyectarán mayores recursos.
«No es razonable pedirles a los accionistas que incurran en mayores aportes, los que se están quemando no por responsabilidad de GasAtacama, sino que por un protocolo internacional que Argentina no ha podido cumplir», dijo el gerente general de la compañía, Rudolf Araneda.
A su juicio, «hay cartas importantes que están en la mano del Gobierno», y aseguró que el Ejecutivo tiene «que tomar resoluciones de carácter administrativo» sin entrar en detalles.
«Confío en que vamos a trabajar con el ministro de Energía (Marcelo Tokman) y con las compañías mineras en una solución», añadió.
No obstante, para el ejecutivo, las mineras deben entregar un aporte adicional de US20 millones al año para poder solventar el mayor costo de producción con diésel en lugar de hacerlo con gas natural.
«Un eventual racionamiento tiene un costo enorme para la gran minería», sostuvo el ejecutivo ante una eventual paralización de operaciones.
GNL
Según Araneda, la solución a largo plazo es la planta de regasificación de gas natural licuado (GNL) que se proyecta en la zona de Mejillones, II Región.
Para esto, Araneda aseguró que la empresa y Suez Energy concretaron órdenes de compras de insumos para desarrollar la iniciativa. «Desistirse (de las órdenes de compra) tiene un costo y se financia con aportes de todas las compañías: de Suez, GasAtacama y de los «G4″ (Codelco, BHP, Collahuasi y Phelps Dodge)».
Hay, dijo, «un acuerdo firmado que sería así, pero es un monto acotado, que está en el rango de los US$ 16 millones. La gracia que tiene eso es que nos permite ganar seis meses».
Fuente: El Mercurio.