A fin de año Transelec definirá si es posible conectar nuevas centrales eléctricas a la línea de transmisión que se construirá para el proyecto Aysén, que desarrollarán Endesa y Colbún.
La línea tendrá 2.000 kilómetros de extensión. Transportará a la zona central la energía por 2.750 MW que generarán las cinco centrales que ambos grupos instalarán en la XI Región.
El viernes el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (Tdlc) aprobó con condiciones la decisión de Endesa y Colbún de realizar en conjunto el proyecto Aysén. Una de ellas es que otros interesados puedan presentar en un período de seis meses una solicitud para que sus desarrollos eléctricos puedan usar la línea de transmisión.
Durante el proceso del Tdlc, Transelec informó que no existiría ninguna posibilidad de compartir ese trazado, porque los estudios habrían determinando que la capacidad máxima del tendido es de 2.800MW. “Los estudios demuestran que la capacidad técnica que se puede transportar se parece mucho a la que producirá HidroAysén, lo que descarta la posibilidad de que esa línea se pueda compartir con otros proyectos de magnitud”, dijo entonces Andrés Kuhlmann, gerente general de Transelec.
Pero, la compañía sigue realizando estudios en Canadá que concluirán definitivamente a fines de año. Estos resultados permitirán definir la capacidad de transmisión óptima que debe tener la línea y determinarán si técnicamente es factible conectar nuevos proyectos a la línea sin poner en riesgo la seguridad del Sistema Interconectado Central. Una de las definiciones que debe resolver Transelec es si construye una línea de alta tensión en corriente continua que tenga una capacidad 500 ó 600 kilovoltios.
Fuentes vinculadas a Colbún sostienen que, según el análisis de los ingenieros, además de ver si se puede expandir la capacidad de transporte de la línea hay otras opciones. Por ejemplo, ver si es factible colocar una línea adicional, que siga el mismo trayecto, pero que en vez de llegar a Santiago se conecte al sistema eléctrico a la altura de Puerto Montt.
Ecologistas desencantados del fallo
Desencantados quedaron los opositores al proyecto hidroeléctrico Aysén con el fallo del Tdlc, que aprobó la alianza entre Endesa y Colbún e impuso cuatro condiciones.
“Las exigencias que impuso son insuficientes, porque no son proporcionales a los riesgos. Les exige enajenar derechos de agua sólo en algunas cuencas y debiera haberlo exigido para el resto del país”, dijo el abogado Alvaro Varela, representante del empresario Víctor Hugo Puchi.
La ecologista Sara Larraín, directora de Chile Sustentable, también rechazó el dictamen. “El fallo es incompleto y establece condiciones débiles”, dijo. Agregó que “la sentencia no implica que el proyecto esté aprobado, sólo autoriza la sociedad entre las empresas (…) Vamos a seguir manifestándonos en contra del proyecto”, indicó.
Fuente: La Tercera.