Ante la proximidad del verano, la estrechez del sistema eléctrico argentino preocupa a las autoridades. Cammesa, la compañía administradora del mercado eléctrico, prevé que la demanda de electricidad va a superar la capacidad de generación instalada, que asciende a cerca de 18.000 Megawatts (MW), entre mediados de noviembre y principios de diciembre. A ello contribuirá el aumento en el uso de aire acondicionado a medida que aumentan las temperaturas.
Para evitar apagones el gobierno dispuso dos medidas: comprar electricidad a Brasil y aplazar los trabajos de mantenimiento en algunas centrales.
Una crisis en el suministro eléctrico de Argentina podría poner más presión a las ya complicadas exportaciones de gas a Chile, elevando las requerimientos internos.
Acuerdo de compras
La importación desde Brasil se realizará a través de dos conexiones de Endesa. Paradójicamente, el tendido bi-direccional había sido levantado para exportar electricidad de Argentina a Brasil y su construcción se financió con contratos de venta a Brasil que posteriormente no fueron cumplidos debido a los problemas de abastecimiento en Argentina.
A finales del primer trimestre Argentina compró a su vecino cerca de 350 MW, y según las previsiones durante la última parte del año comprará otros 500 MW. Ambos países tienen un convenio según el que Brasil envía electricidad a cambio de 1,2 millón de metros cúbicos diarios de gas.
La situación trasandina se ha complicado por la baja de 5.000 MW debido a reparaciones en cuatro generadoras. El sistema está operando con alrededor de 17.000 MW más 7% de reserva.
Hasta ahora, la demanda ha sido cumplida, pero ese panorama puede cambiar en el verano, cuando se sumen unos 600.000 aparatos de aire acondicionado al consumo, entre otros artefactos.
El lunes, el sistema eléctrico marcó una generación de 16.750 MW, mientras que el martes llegó a 16.999 MW, muy cerca del límite de capacidad. El récord histórico del país se alcanzó el 31 de julio de este año, con 17.395 MW.
La situación podría ser más complicada en las provincias. En Rosario se propuso a los comerciantes que redujeran la iluminación de sus vitrinas entre las horas de mayor consumo, Misiones está negociando comprar hasta 300 MW diarios desde Paraguay y Entre Ríos estudia cambiar el huso horario y adelantar el ingreso a la administración pública durante el próximo verano.
Fuente: Diario Financiero