El megaproyecto hidroeléctrico que Endesa y Colbún planean en Aysén está encontrando un mayor
respaldo del gobierno.
El Ejecutivo considera que el desarrollo de los recursos hidráulicos de la zona tendrá un impacto favorable en los costos de operación del sistema eléctrico, a la vez que permitirá darle al país seguridad e independencia en el suministro energético de largo plazo.
Como parte del proceso de consulta que realiza el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC) respecto del proyecto de generación -que supone la instalación de 2.355 MW en la XI Región y una inversión de US$ 4.000 millones, considerando los US$ 1.500
millones de la línea de transmisión-, la Comisión Nacional de Energía (CNE) dio apoyo a la iniciativa que
lideran Endesa Chile y Colbún.
El lunes 25 de junio el secretario ejecutivo de la CNE, Rodrigo Iglesias, respondió una solicitud realizada días antes por el TDLC, organismo que en los próximos
días debe pronunciarse sobre la alianza entre las generadoras y su potencial impacto en el mercado
eléctrico.
El tribunal le solicitó a la entidad pronunciarse respecto de los derechos de aprovechamiento de aguas que poseen las eléctricas y la aptitud hidrológica.
Dentro de las conclusiones del escrito presentado, Iglesias indicó que «esta comisión estima necesario
hacer presente a este Honorable Tribunal que no deje de considerar que el desarrollo de los recursos
hidroeléctricos que se encuentran en el extremo sur del país podrían fortalecer la seguridad e independiencia
energética del país, producto de su tamaño y estabilidad hidrológica».
En su informe, el titular de la CNE destacó que dada la envergadura de las recursos involucrados la explotación
de los mismos tendrá un impacto favorable sobre los costos del sistema eléctrico. En ese sentido,
Iglesias agregó que «estos (recursos) se podrían transformar en un elemento estabilizador de los costos de producción y operación del sistema, lo cual reduciría la exposición a la volatilidad de los precios de los combustibles que Chile importa para la
generación eléctrica».
En ocasiones anteriores, el ministro de Energía, Marcelo Tokman, ha señalado que las centrales de Aysén son necesarias, pero asegurando que es una alternativa más para mejorar la oferta de energía y que hay otras
fuentes que también pueden aumentar la capacidad del sistema eléctrico.
Como parte del proceso que lidera el TDLC, Endesa entregó al organismo antimonopolio el detalle de
los derechos de agua que posee actualmente y el potencial de generación de los mismos.
La generadora tiene derechos de agua por 3.459 MW fuera de la zona de Aysén, para lo cual maneja nueve proyectos con centrados principalmente en la X Región. Además, tiene en trámite en la DGA otros 1.081 MW que suponen otras cinco iniciativas.
Colbún, que es controlada por el grupo Matte, en tanto, precisó que tiene derechos de agua por unos 2.000 MW.
Fuente: La Tercera