Diferencias entre los ministerios de Infraestructura y de Economía sobre el impuesto a las exportaciones de gas es lo que ha demorado la oficialización del nuevo tributo que Argentina decidió imponer al fluido que vende a Chile.
Así se afirma en Buenos Aires, donde surgieron versiones que indican que Infraestructura y Planificación, a cargo de Julio De Vido, el hombre de confianza del Presidente Néstor Kirchner, presentó un borrador con retenciones fijas (un porcentaje estable aplicado a cualquier volumen), pero que en Economía aducen que, en el caso del gas, existen ciertas dificultades vinculadas al Código Aduanero que lo impiden, por lo cual éstas deberían ser «móviles». «El Mercurio» intentó obtener alguna precisión en el hermético ministerio de Infraestructura, que se negó a comentar el asunto. Victoria Giarrizo, del CERX (Centro de Economía Regional y Experimental), explicó -en cambio- que ya es tradicional que el Estado argentino fije impuestos variables a ciertos envíos y que los elementos considerados «pueden ser la demanda o el volumen; hay que ver qué parámetros se fijan en la Casa Rosada, supongo que va a ser la demanda interna». Lo anterior quiere decir que el impuesto puede subir o bajar según ciertas condiciones, como la disponibilidad para el uso interno.
En relación a lo anterior, en Argentina volvió a la palestra la demanda de algunos sectores políticos afines al gobierno para que se prohíban los envíos de gas y otros hidrocarburos.
Proyecto de ley
Es así como la Comisión de Recursos Naturales de la Cámara de Diputados aprobó el martes pasado un proyecto de ley que habilita las exportaciones de gas, petróleo, carbón, uranio y varios minerales, únicamente en el caso que las reservas probadas superen diez veces el consumo interno del año anterior al período considerado «y sólo con respecto a dicho excedente».
Cabe señalar que la comisión antes señalada votó por unanimidad, con la excepción de un diputado radical ausente por enfermedad, y está integrada por partidos de izquierda aliados al gobierno y peronistas del oficialismo. Aun así, no es claro que la ley vaya a ser aprobada en la votación general ya que, el año pasado, un proyecto de similar tipo se «cayó» al vencerse los plazos para su tratamiento en tablas.
En un ámbito conexo, y como nueva señal que Argentina mantendrá su actual política de usar la exportación como principal variable de ajuste, el ministro Julio De Vido aseguró -durante un acto público-, que «se van a respetar los niveles de abastecimiento» de gas para el interior del país, en lo que resta del período invernal de 2006.
Fuente: Emol.