La petrolera brasileña Petrobras, que actualmente negocia un aumento del precio del gas que importa desde Bolivia, anunció hoy un incremento de cerca del 10% en lo que paga por el combustible, que atribuyó a una revisión prevista en el contrato y no a una renegociación.
La petrolera estatal brasileña informó de que el precio del gas será reajustado a partir del 1 de julio próximo «en cumplimiento del contrato de adquisición del gas boliviano firmado entre Petrobras y la estatal boliviana YPFB».
Pese a que el precio del gas que Petrobras paga a YPFB aumentará cerca del 10%, el reajuste apenas será de un 6% para las empresas que distribuyen el combustible en Brasil, según un comunicado de la estatal.
«El precio definitivo, calculado en función de la variación de una cesta de combustibles en el mercado internacional, será conocido a comienzos de julio», agrega la nota.
Brasil importa diariamente cerca de 26 millones de metros cúbicos de gas natural boliviano, prácticamente la mitad de su consumo del combustible.
La alta dependencia del gas importado desde el país vecino llevó a las autoridades brasileñas a temer la posibilidad de desabastecimiento ante la decisión que el Presidente boliviano, Evo Morales, tomó en mayo de nacionalizar los hidrocarburos.
Petrobras, la petrolera que más había hecho inversiones en Bolivia, cerca de US.000 millones, fue la empresa más perjudicada por la nacionalización de los hidrocarburos.
Pese a que Morales garantizó la normal oferta del gas boliviano a Brasil, ha advertido en varias oportunidades que pretende negociar una mejoría en el precio del combustible no prevista en el contrato para el gas que vende tanto a Brasil como a Argentina.
Fuentes de Petrobras aclararon que el aumento anunciado hoy se basó en una cláusula del contrato que prevé revisiones periódicas del precio.
Las negociaciones solicitadas por Bolivia para estudiar un posible aumento del precio del gas no previsto en el contrato comenzarán esta semana en La Paz, pero Petrobras ha advertido que se opondrá a cualquier reajuste que no esté previsto en el contrato y que podrá llevar la disputa a tribunales internacionales.
Paralelamente, Brasil ha anunciado una serie de medidas para reducir el consumo y la dependencia en el gas natural boliviano, y el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, ha advertido de que el país no puede depender de ningún vecino.
Petrobras ya puso en marcha un proyecto para adelantar de 2012 a 2008 la extracción de las reservas de gas natural descubiertas en la cuenca marina del estado de Espíritu Santo, que permitirá al país producir 24,2 millones de metros cúbicos diarios, prácticamente el mismo volumen que importa de Bolivia.
También avanza en la construcción de los gasoductos necesarios para transportar el gas de Espíritu Santo al resto del país y en breve iniciará pruebas para intentar sustituir el gas natural boliviano por gas natural licuado (GNL) como combustible de algunas generadoras térmicas.
Fuente: EFE.