Más empresas españolas podrían verse obligadas a modificar sus contratos de operación en Bolivia luego de que el gobierno, atendiendo a una demanda de los trabajadores de la Administración Autónoma de Servicios Auxiliares a la Navegación Aérea (Aasana), decidiera revisar el contrato de administración con la empresa Servicios Aeroportuarios Bolivianos SA (Sabsa), filial de las corporaciones españolas Aena y Abertis.
Sabsa administra los principales aeropuertos de La Paz, Cochabamba y Santa Cruz. El director general de Aeronáutica Civil, Javier García, dijo que la revisión fue solicitada por los trabajadores de la Aasana que acusan a Sabsa de incumplir su contrato y no hacer las inversiones prometidas.
Además de Repsol YPF, existen otras empresas españolas en Bolivia que temen una posible nacionalización, como Iberdrola, que participa en dos distribuidoras de electricidad, Electropaz (La Paz con 57% del capital), y Elfeo (El Alto con 59%). En 2005 estas dos distribuidoras suministraron a 411 mil clientes el 37% de la energía distribuida en Bolivia y alcanzaron una facturación conjunta de 65 millones de euros.
Otra empresa en ascuas es Red Eléctrica de España (REE), propietaria de la compañía Transportadora de Electricidad (TDE) a través de 2.000 kilómetros de líneas y 20 subestaciones. En 2005, TDE aportó 19,5 millones de euros a la cifra de negocio de REE, 13,1 millones al EBITDA y 5,7 millones al beneficio después de impuestos.
El grupo Santander, con gran presencia en Iberoamérica, era propietario del tercer banco más importante en Bolivia, el Banco Santa Cruz, pero en marzo abandonó definitivamente el país.
Fuente: Bolpress.