Rendimiento aerodinámico: el sello para el vehículo eléctrico Taycan

Esta característica contribuye a reducir el consumo de energía y, por lo tanto, a aumentar la autonomía.


Compartir:

Con un valor Cx a partir de 0,22, el vehículo eléctrico Taycan ofrece el mejor coeficiente aerodinámico de todos los modelos actuales de Porsche.

La superficie frontal mide 2,33 metros cuadrados, lo que da como resultado un factor de resistencia aerodinámica de 0,513 metros cuadrados. Esta aerodinámica contribuye a reducir el consumo de energía y, por lo tanto, a aumentar la autonomía.

Además del propio diseño del vehículo, que guarda relación con el ADN Porsche, destacan especialmente elementos como las Air Curtains y el conjunto de medidas Porsche Active Aerodynamics (PAA).

[LEA TAMBIÉN: El aporte de la minería a la carrocería del vehículo Taycan, el modelo 100% eléctrico de Porsche]

Cabe indicar que su rendimiento aerodinámico es resultado del trabajo realizado en los prototipos previos y el perfeccionamiento de los detalles.

Antes de pasar 1.500 horas en el túnel de viento a escala real, el Taycan ya había sido sometido a simulaciones de CFD (Computational Fluid Dynamics; simulación computacional de flujo) en 3D y había superado unas 900 horas en el túnel de viento como modelo a escala 1:3.

Ventajas técnicas

Las Air Curtains son elementos destacados en el vehículo: los faros parecen flotar uniformemente sobre estas grandes tomas de aire, que lo canalizan hacia los pasos de rueda delanteros. Esto reduce las turbulencias y, en consecuencia, el coeficiente de resistencia al aire, igual que lo hacen las llantas con función aerodinámica.

El Taycan también ofrece una aerodinámica activa en la parte trasera. Dependiendo de la situación, el alerón se despliega en tres posiciones distintas para influir en la resistencia aerodinámica del vehículo y así mantener la zaga siempre pegada al suelo.

Junto con ello, este modelo tiene la capacidad de ofrecer la menor resistencia aerodinámica posible para aumentar la eficiencia y la autonomía, por ejemplo, en los viajes, pero al mismo tiempo es capaz de generar carga para conseguir los mejores tiempos por vuelta en circuito.

Además, este vehículo eléctrico se beneficia también de las posibilidades aerodinámicas que ofrece su chasis con suspensión neumática. En función de la velocidad y del modo de conducción seleccionado, rebaja la altura de la carrocería para minimizar todo lo posible la resistencia aerodinámica.