Gloria Hutt y los avances en movilidad eléctrica: “Nuestro rol es facilitar el encuentro entre las partes”

La Ministra de Transportes y Telecomunicaciones, habló con ElectroMov sobre el acuerdo público-privado para la electromovilidad y de su penetración pública.


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Hace pocos días se firmó transversalmente un compromiso  público-privado para la electromovilidad entre el gobierno y 38 empresas privadas a principios de diciembre. En este contexto (y en una “movida” semana en la que se dio luz verde a los nuevos electrobuses del Transantiago), la Ministra de Transportes y Telecomunicaciones, Gloria Hutt Hesse, conversa con ElectroMov para detallar el rol específico de su cartera en el acuerdo  y acerca del impacto de la medida en el transporte público nacional.

¿Cuál es el rol específico del ministerio en este acuerdo público privado?

Nuestro rol es facilitar el encuentro de las partes, hacer coincidir el interés de la empresa eléctrica con el interés del operador y con el fabricante. Debemos hacer coincidir los tiempos, pero también hacer coincidir el modelo de negocios.

El acuerdo se traspasa el sistema, pasa a ser parte de la operación. Comienza como un acuerdo entre privados, entre la compañía eléctrica y el operador. Tuvimos un rol en promover que esto ocurriera y después en ver la manera de traspasar estos buses al sistema y poder financiarlos debidamente.

¿En qué fase de integración con la electromovilidad en el transporte público?

Estamos todavía en una fase incipiente. Yo creo que cuando estemos en marzo con casi 700 nuevos buses (200 de los cuales serán eléctricos), sí vamos a tener una integración eléctrica con Metro: entonces la mayor parte de los viajes se va a hacer con sistemas eléctricos. Pero todavía tenemos que avanzar mucho más en incorporar buses eléctricos.

Interés de operadores

¿Cuál es el nivel de interés que se percibe en los operadores del transporte público por estas tecnologías?

Es muy alto, porque a pesar de que la inversión es mayor que los buses diésel, el costo de operación es muy bajo, es más o menos un 30% respecto a un bus a diésel.

Lo que yo creo que va a pasar, es que dado que en la licitación separamos la operación de los activos, y los operadores que postulen solo se preocupan de operar, se les va a hacer muy atractivo operar buses eléctricos. El costo de operar va a ser mucho menor, es más simple, todas las piezas son mucho menores, hay menos reemplazo y tiene menos riesgos de panne. Realmente tiene muchas ventajas, seguramente por esa razón, es altamente probable que haya muchas ofertas por buses eléctricos.