Electromovilidad: sepa por qué Costa Rica es un mercado “clave” en Latinoamérica

Mónica Araya, vicepresidenta de la Junta de la Asociación Costarricense de Movilidad Eléctrica, señala que este país tiene un Plan de Descarbonización y un 99% de su matriz energética es renovable.


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Una matriz energética principalmente renovable y un tamaño de territorio acorde a los niveles de autonomía que presentan en la actualidad los vehículos eléctricos, son en la opinión de Mónica Araya, vicepresidenta de la Junta de la Asociación Costarricense de Movilidad Eléctrica, dos razones que explican la posición de Costa Rica frente a la electromovilidad.

La profesional, que es además cofundadora de la organización Costa Rica Limpia, que promueve el desarrollo limpio desde un enfoque de ciudadanía, estuvo recientemente en Chile, visita durante la cual estuvo como expositora en el evento #EnelFocusOn, instancia en la que se dialogó sobre cómo la movilidad eléctrica puede revolucionar el transporte público, además de asistir a la competencia de Fórmula E realizada en la ciudad de Santiago.

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Junto con ello, se reunió con ElectroMov, para conversar sobre la forma como la movilidad eléctrica está impactando en la vida de las personas.

Es así como comenta que “he trabajado en sustentabilidad por veinte años, pero en los últimos seis nuestra relación con el petróleo es algo que a mí me ha interesado mucho. Obviamente si hubiera pensado esto hace 20 años, la idea de no usar petróleo, es decir, no utilizar gasolina ni diésel, hubiera sido algo muy lejano, pero por suerte se vino toda esta revolución tecnológica y vemos que ese futuro que parecía tan distante está cada vez más cerca, en la medida en que yo misma por ejemplo nunca me imaginé que en 2017 ya iba a poder ir por las calles de San José, Costa Rica, de A a B, sin usar ni una gota de gasolina o diésel”.

Impulso a la electromovilidad

La especialista destaca el buen momento que experimenta la electromovilidad en Costa Rica, mencionando por ejemplo que el país centroamericano “el 24 de febrero anuncia su Plan Nacional de Descarbonización de toda la economía. De los 10 ejes de descarbonización, tres están relacionados con la transformación del transporte público, privado y de carga”.

A favor de estos objetivos juegan factores como el que Costa Rica “tiene electricidad renovable al 99%. 300 días al año toda la electricidad es 100% renovable, es uno de los países en que más sentido tiene la electromovilidad, porque además es pequeño, las distancias son relativamente pequeñas, lo máximo es 500 kilómetros. El recorrido diario es de 35 kilómetros, y además en este momento hay una necesidad muy fuerte de hacer innovaciones en el sistema de transporte público, porque hay congestión”.

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En esa línea, destaca los logros que Costa Rica presenta en aras de un transporte cada vez más sustentable, como “la primera ley de movilidad eléctrica de América Latina. Además, la empresa estatal de energía tiene la flota más grande de vehículos eléctricos, mientras que la compañía de correos del país tiene un compromiso de electrificar sus motos. Junto con ello, en julio se completa la primera fase de los cargadores rápidos por todo el país”.

De manera adicional, señala que en Costa Rica “hay una ley de movilidad eléctrica que quita los impuestos a todos los tipos de electromovilidad por unos años, es temporal. Sabemos que las tecnologías van a ir siendo cada vez más baratas, entonces, por unos cinco años se ofrece un incentivo para ayudar a las tecnologías a que sean un poco más competitivas con las de diésel y gasolina, con el fin de democratizar esto”.

Mirando la estrategia chilena

En visión de la cofundadora de la organización de Costa Rica Limpia, los avances que se están llevando a cabo en su país se explican porque “no nos hemos visto limitados por nuestro pequeño tamaño, sino que más bien lo volvemos al revés, y decimos qué importa que seamos pequeños. Podemos tener ideas grandes y queremos ver cómo crear una sociedad descarbonizada, es decir, cero emisiones, y que el mundo aprenda de nosotros como un laboratorio. En ese caso, en Chile lo que sería interesante es como que se la crean más, que digan que van a ser líderes”.

En ese análisis, destaca hitos como “los 100 buses eléctricos, que ya están operando, más los 100 que vienen, más el hecho de que hay energía solar, cobre y litio. Eso no le pasa a cualquier país. Para nosotros es maravilloso que eso esté pasando en un país latinoamericano”, haciendo hincapié en “para mí el caso de Chile es muy interesante, porque lo que más necesitamos resolver en Costa Rica en este momento es cómo encontrar un modelo financiero para pagar por los buses eléctricos”.

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En ese contexto, Mónica Araya resalta el nivel de involucramiento que presenta el sector privado, ejemplificado en el caso de Enel, BYD y Metbus. “Esos tres lograron un modelo de negocios que fue lo que impulsó la gran historia de los primeros 100 buses eléctricos. Es decir, no fue sólo el Estado, sino que también fue ese impulso de negocios que creó un modelo innovador en la parte de cómo financiar, porque en este momento la tecnología está lista. La gente ve los beneficios, pero en dónde necesitamos más ideas es respecto a cómo financiarlo para que esto haga como un efecto dominó”.