Soy usuaria de vehículo eléctrico desde 2017. Debo haber sido la única mujer que andaba en traje de oficina sobre un scooter. Todos me miraban, daba igual. Llegaría mas rápido a mi destino que los que andaban en auto a mi lado.
Vivir cerca de mi trabajo me permitió moverme en este vehículo el 99% del tiempo, el tiempo acompañaba porque casi nunca pasé frío y apenas me mojaba si llovía. También tengo auto fósil, que ocupo para distancias más largas, o para ir dejar a los niños al colegio, etc.
El 16 de Noviembre de 2018 a las 22:30 horas fui asaltada y encañonada a la salida de un restaurant en Bicentenario, comuna de Vitacura. Como era de esperar, me robaron mi auto y todo lo que tenía dentro, que era bastante, pero material. Puedo agradecer haber resultado ilesa. Entre trámites de seguro, pérdida total, comisaría, juzgados, abogados y distribuidor, estuve 6 meses sin auto.
Mi scooter alivió muchísimo ese tiempo de espera, que luego del tercer mes, se convirtió en una espera más bien tranquila, sin ansiedad, ya que tenía como movilizarme eficientemente y mi familia me apoyaba con los trayectos mas largos.
Fue así como me di cuenta de que ya no dependía de mi auto para movilizarme, mi scooter era suficiente para mí.
Hoy me muevo casi totalmente en scooter, y ya no me miran, porque no estoy sola, somos miles de usuarios. Aunque me gustaría ver mas mujeres sobre vehículos eléctricos, cualquier vehículo eléctrico.
En Chile, no creo que existan datos duros acerca de cuántas mujeres utilizan vehículos eléctricos, pero puedo asegurar, como única mujer directora de AVEC (Asociación Gremial de Vehículos Eléctricos de Chile), que somos minoría.
En Latinoamérica el uso y relación con la electromovilidad va en crecimiento, siendo Chile uno de los principales impulsores de la electromovilidad. Desde Scooters (de arriendo los más utilizados), motos, hasta automóviles y buses. En el transporte público ya circulan más de 400 buses eléctricos en Santiago, convirtiendo a Chile en el país con mayor cantidad de buses eléctricos en las calles del mundo, a excepción de China.
En las ultimas semanas en donde el estallido social ha paralizado a gran parte del país, la pregunta es: ¿Hay espacio para la electromovilidad en tiempos de crisis?
La respuesta a ello es contundente,: SÍ. Debido a varias razones.
La electromovilidad viene a desafiar a un país fósil que es el país en el que todos crecimos y que nos acostumbramos a ver.
Hoy, en tiempos de cambios estructurales requerimos cambiar también la conciencia ciudadana. El desafío es transformarnos en ciudadanos responsables no solo desde el punto de vista participativo en la toma de decisiones e involucrados con la sociedad (lo que estamos experimentando en estos días), sino también ciudadanos más cuidadosos con el medio ambiente y agentes de cambio. No hay esperar a que ningún organismo nos haga tomar conciencia del cambio, el cambio está en nosotros mismos.