Una de las grandes inquietudes que los usuarios detectan en el uso del vehículo eléctrico no tiene que ver con las prestaciones del mismo, sino con la infraestructura de carga requerida para sustentar los diversos traslados.

En esa línea, es que cada vez se van sumando nuevos puntos de carga a nivel global, considerando la expansión de la movilidad eléctrica en los diversos países.

Tal es el caso de Europa, donde según las últimas estadísticas disponibles, ya hay más de 200.000 puntos de carga instalados en dicho continente.

Alemania, Francia y Reino Unido son los países que mayor despliegue han realizado en los últimos años. Cabe indicar que España llega a un cuarto de todos los puntos de recarga que tiene Alemania, pese a ser el segundo país fabricante de vehículos en Europa.

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Según las estadísticas facilitadas por la Comisión Europea, Alemania ya dispone de más 30.000 puntos de carga al igual que Francia. Por detrás le sigue muy de cerca Reino Unido con más de 25.000 puntos. A la cola del tren eléctrico se sitúan España con algo más de 10.000 puntos e Italia con solo 4.000.

Estas cifras se traducen en que los trayectos en Europa poco a poco son posibles realizarlos en vehículo eléctrico, gracias al avance constante de la infraestructura y de los esfuerzos que gobiernos, compañías eléctricas y fabricantes de vehículos.