En junio pasado, la organización de la Fórmula E daba por cerrada la posibilidad de que la competencia volviera a Santiago. Incluso la ciudad no figuraba en el calendario tentativo para la quinta temporada de la competencia, según informó La Tercera.

Esto porque se consideró excesivo el costo del arriendo del Parque O´higgins, escogido para acoger la prueba ante las quejas de los vecinos del Parque Forestal. “El monto por derechos municipales sería similar a lo pagado el año pasado, cercano a los $ 450 millones”, decía un comunicado entregado en junio por Espacios Públicos en la Municipalidad de Santiago.

La Fórmula E aceptó pagar el monto, que según una presentación realizada ante los vecinos por el alcalde de Santiago, Felipe Alessandri, será destinado a varias obras. Ante la falta de objeciones, dio la aprobación a la carrera en la comuna.

La competencia contó con financiamiento de los ministerios del Deporte y Energía, pero esta vez no recibirá aporte público, por lo que la fecha en Santiago, fijada para el 26 de enero, tendrá aportes solo de los auspiciadores. El acuerdo será por dos años.

Solo falta la oficialización de la prueba por parte de la FIA, en su Consejo Mundial a realizarse el viernes próximo.