Hasta ahora uno de los obstáculos que ha presentado la masificación de los vehículos eléctricos es el largo tiempo que toma la recarga eléctrica, frente a lo expreso de llevar un auto convencional a una estación bencinera común y corriente.

Eso hasta ahora, porque la firma china NIO recientemente dio a conocer primero un sistema de recargas móviles en base a furgonetas para inyectar energía sin acudir a una electrolineras. Y a continuación anunció un proyecto aún más innovador que promete las recargas en solo tres minutos.

La compañía china aspira a localizar más de 1.000 estaciones de servicio en distintos países del mundo hacia 2020.

De acuerdo con diversos reportes, ya se han hecho reservas por 3.500 modelos del NIO ES8, un SUV que comenzó su producción durante este año.

El desarrollo fue pensado precisamente para los ES8, los que deberán entrar a una estación de carga donde una máquina realizará todo el proceso de sustitución de batería.